Mejor hecho, que perfecto.
Esta semana casi no llego a mandaros esta carta. Dentro de poco veréis porqué. Y no porque haya pasado mi tiempo contemplando el cielo azul, que espero hacerlo mañana. Escribo esto llena de hilos, pintura y un trozo de tela sujetándome el pelo. Son las 0:36 de hoy y ayer a las 21:00 dije ¡Hostia! ¡Qué mañana es viernes! ¡La newsletter!
Casi no la hago, por querer ser Doña Perfecta.
Tenía dos opciones: Dejar pasar este viernes juzgándome por no haber sacado tiempo antes para escribirla o simplemente no hacerla pero sin juzgarme, siendo amable conmigo misma porque tan sólo soy una persona y no puedo hacer mil cosas a la vez.
Eso me alivió de repente. El aceptar que todo está igual de bien, haga todo lo que planee o no. Me alivió tanto que llegó la inspiración. Por el simple hecho de darme espacio a no ser perfecta, a poder saltarme un viernes, llego el impulso de escribir de manera natural, como siempre, y escribir esto antes de irme a dormir.
Las cosas buenas de nuestra vida ocurren o llegan a nosotras en la medida que seamos amables con nosotras mismas. Simplemente por dejarnos respirar y no exigirnos.
El día que decidí sentirme suficiente sin ser perfecta, todo cambió. Mi mundo se mueve mejor y ya no soy mi peor enemiga. Y si se me olvida, me lo recuerdo.
<<Mejor hecho, que perfecto>> <<Hazlo lo mejor que sepas, y cuando sepas hacerlo mejor hazlo mejor>> La perfección no nos salvara de la muerte; pero seguro que nos amargará la existencia. Entonces ahora soy menos dura conmigo misma.
Así que la única idea con la que quiero que os quedéis hoy es la de ser amables con vosotras mismas, indiferentemente de como os salgan las cosas, porque esa energía trabajará para vosotras y os hará la vida fácil.
Nos lo debemos, el tratarnos bien en todas las áreas de nuestra vida, en el trabajo, en casa, con nuestros amigos. Ser agradables dentro de nuestras mentes y en las palabras que decimos en voz alta.
Sencillo pero muy efectivo.
Os deseo un gran fin de semana, disfrutad de vuestra vida y no dejéis para más tarde, para cuando todo os salga bien, el ser dulces con vosotras.
Love,
Nuria