No, no hablo de Idris Elba, en este caso excepcional, fue producto nacional.
Estaba claro, ha ganado el cotilleo, quiero decir, la ley de la atracción.
You ask, I deliver
.
La versión superficial, materialista y egoísta de la misma es:
<< Lo que ves en tu mente, lo tendrás en tu mano>>
Normalmente pedimos dinero , coches, casas y el tio de 1,80 tumbado en cama. En nuestra tristeza provocada por la aparente escasez de aquello que creemos que nos hará felices, empezamos a pensar en ello compulsivamente. Como si tu queja y tu lista de deseos al universo fueran la receta infalible en atraer lo que te falta. Como si tu pataleta pudiera hacer al universo reaccionar y darte aquello que deseas. Nada más alejado de la realidad.
Guess what,
el universo no es tu madre dándote aquello que pides para que te calles de una vez.
¿Pero de verdad que se puede atraer lo que deseas? ¿Funciona la ley de la atracción?
Para mi sí. Quien quiera decir que es un mito. Pues mito. No tengo ningún interés en convencer a nadie, solo en compartir aquello que me funciona. Cada vez que recibo algo que quería de la nada mi hermana dice: <<Vaya, qué sorpresa, otra cosa que te cae del cielo>> me juzga con amor y gira la cabeza.
La ley de la atracción funciona quieras o no, lo sé.
Pero lo de repetir qué quieres mientras sientes que te falta no es la receta.
Feeling is the secret.
Sentir la presencia de lo que quieres.
La receta es el asumir.
Asumir que eso que deseas es una realidad y que te da igual cuando llegue a ti, porque sabes que lo hará.
La receta es alegrarte como si ya hubiera ocurrido.
Si te alegras antes de que ocurra, tu cuerpo ya ha asumido tu deseo como algo real, así que antes o después llegará, porque eres un imán.
La receta es la felicidad incondicional.
No espero a que aquello que quiero llegue para ser feliz. Soy feliz antes y permito que llegue. De este modo, llega mejor que cualquier cosa que te hayas podido imaginar.
La receta es sentirte merecedora de aquello que amas
indiferentemente de cual sea tu estado de ánimo. ¿Qué quiere decir esto? Que aunque tengas un mal día, o una mala semana, y no estés poniendo en práctica nada de lo anterior, aun así te mereces que llegue a ti fácil.
<< Lo que ves en tu mente, lo tendrás en tu mano, siempre que lo asumas como real y te alegres por adelantado>>
deberían añadirle.
No es tanto visualizar, como sentir esa nueva realidad que quieres para ti.
Voy a poner un ejemplo:
Tú quieres más dinero, porque crees que más dinero te va a hacer sentir más libre. ¿Qué quieres?¿Dinero o libertad? ¿Qué emoción tienes que sentir para atraer dinero? Libertad. Entonces tú te sientas a meditar y te preguntas ¿Cómo me sentiría si me sintiera libre? Y dejas que esa emoción se apodere de tu cuerpo. Entrenas a tu cuerpo en la emoción de tu deseo cumplido. Abandonas así un poco el hacer, y das espacio también al atraer. Ambos van de la mano.
Lo más potente que he practicado es
ser feliz sin razón aparente y la gratitud
.
Sí, ya llega el salseo, el como manifesté un montón de cosas esa semana que puse en práctica lo de
estar feliz porque sí
,
(Lee sobre esto aquí)
y entre ellas, el tener la cabeza del actor que me parecía más sexy entre mis piernas, perdón, quería decir fundirme en besos con ese actor que me había robado el corazón desde que lo vi en televisión con dieciocho años.
Por aquel entonces, yo seguía enamorada de mi mejor amigo, pero no funcionó lo nuestro y el ya tenía nueva novia.
She can beat me but she cannot beat my outfit
.
Esa semana decidí dejar de arrastrar mi pena y cambiar de mentalidad, y poner en práctica eso que había oído de la felicidad incondicional. Coincidió que mientras practicaba eso, veía una serie en la que salía este actor. Mientras adelantaba el capítulo para ver solo sus escenas pensaba: ¿Cómo será acostarse con este hombre? Obviamente yo ignorante de lo que pasaría en unos días. Tampoco estaba intentando atraer eso. Pero se mezclo
mi imaginación con esa emoción intensa de ¡qué feliz soy no me falta de nada!
Llego a una fiesta y me abre él la puerta de la casa.
¡Hola, soy …!
Yo contestaba Nuria mientras le rezaba a la virgen el no ponerme roja. Y sí, lo primero que hice fue abrir la nevera y beberme una cerveza de golpe para poder relajarme y ser la camionera-persona que suelo ser.
-Mira prueba este queso, lo he traído yo.
(Yo incapaz de mirarle a los ojos)
-¿Te gusta?
(Necesito mandarle un mensaje a mi hermana ya)
-Toma prueba este vino. ¿Rico verdad?
(Ayuda bastante a verte como un ser humano cualquiera)
Después llegaron los chupitos, sus me dejo caer en tus hombros y sus te aprieto la rodilla cariñosamente.
-¿Esa camisa que llevas la has hecho tú verdad?
Empezamos a hablar sobre Cléa.
-¿Qué me harías a mi?
-Un traje de lino
beige
con cuello mao.
-Me encanta el cuello mao.
Pero se lio la cosa.
-¿Salimos a la terraza? Me dice mientras me da una copa de vino. Era finales de enero, llevaba puesta
la camisa Lily
, estaba descalza y hacía un frío que te morías. Pero, a ver quien es la guapa que dice que no.
-Cuando hace frío me late el corazón super rápido.
Le pongo la mano en el pecho y lo confirmo.
-Yo estoy normal- le digo mientras me pongo la mano en mi corazón. Va él y me mete la suya por el escote encima del pecho, un poco más arriba de la lazada, deja la mano quieta unos segundos.
-Sí.
-Uyyy, casi - le digo.
-¿Casi?
-Hombre… ( Mientras para mis adentros pensaba: ¿me está tocando casi un pecho?) Y lo vuelve a hacer. Ahí ya abandoné mi cuerpo. Le empiezo a hablar de cualquier otra cosa porque me estaba entrando la vergüenza. Él me corta y me dice:
-¿Cuánto más vamos a ignorar esta tensión entre los dos?
-¿No estás con alguien? Le pregunto.
-¿Vas a pensar por mi?
-Seguro que si pienso sólo por mi me lo paso muchísimo mejor- contesté.
Y el resto es una nube borrosa de besos, caricias, mordiscos y suspiros.
-¿Donde te vas después? Me pregunta.
-A mi casa.
-Yo contigo.
¡Ay mamá!
A casa vino, y al taller también, pero no hubo traje. Antes el taller y mi habitación eran lo mismo. Dos espacios separados por una cortina
. Quite the story.
Al amanecer, estabamos los dos tumbados en mi cama y me pregunta:
-¿Estás bien? Te ha cambiado la energía.
Yo estaba empezando a asimilar lo que me acababa de ocurrir. Estaba flipando, básicamente.
-Sí, sí, pero te voy a decir una cosa que no es momento fan, pero es que donde esta tu culo ahora, estaba mi ordenador con tu cara esta semana mientras veía (
Enter show name)
-
¿Te gustó la serie?
-No mucho ( Tú sales guapo a morir, pensé)
Se despidió de mi con un beso en la boca y otro en la frente.
Ok. Where’s the camera?
-¿No hace falta que te acompañe a la puerta no?
No le acompañé a la puerta para no enamorarme. Y esa fue la última vez que lo vi. Me encantaría decir quién pero me lo voy a guardar. Solo lo saben mis 50 amigas cercanas.
En esa noche que el universo me regaló, con su cabeza entre mis piernas, comprendí por primera vez porque no tenía que haber funcionado con mi mejor amigo y que si escogemos nuestro estado emocional, y decidimos ser felices porque sí, nos pasarán las cosas más impensables y divertidas. Porque siempre hay un plan mejor de lo que podemos imaginar.
¿Funciona el alegrarse por adelantado? ABSOLUTELY. ¿Debemos utilizar la ley de la atracción a nuestro favor? Sí.
Molaría dar un taller de esto, un día con café, todas juntas.
How to manifest … the life of my dreams.
Para ver la camisa de la suerte:
Love,
Nu.