La guapa del grupo.
Nos engañaron. La guapa no es la que la gente señala por la calle. La guapa es la que así lo decide. Y en esta realidad de trends de Tiktok en las que una mujer se enorgullece de tener 7.000€ menos en su cuenta, por haberse operado la nariz, no tocarse la cara, lejos de ser lo normal, parece activismo social. Y me atrevería a decir que las únicas bellas en unos años serán las que se permitieron envejecer con elegancia. Y repito, no estoy en contra de la cirugía, estoy en contra de la insatisfacción constante que sentimos sobre nuestros cuerpos que nos lleva a estar pinchando, cortando y cosiendo cualquier ángulo no instagrameable. Y también estoy a favor del silencio de las que se operan, no vaya a ser que las niñas piensen que el bisturí es el único remedio a sus inseguridades. Quizás hay que preguntarse ¿y quién me enseñó a mi a no quererme? ¿Y quién me dijo que esto de mayor seria una inseguridad para mí? El brillo de los ojos no se opera, como decía Lola Flores. Y cuando todas lleven la misma cara, ese brillo es lo único que va a quedar.
Pero me voy a lo básico, una quedada con amigas y una se siente insegura porque cogió peso, siente que otra llama más la atención y que ya no es ella a la que la gente ve como guapa. Todo esto, pensado y orquestado en su mente. No señalo esto como algo malo, porque todas hemos podido sentirnos así. El tema es si dejamos que ese pensamiento, que puede quedarse en fugaz e insignificante, gane, y en consecuencia nos etiquetemos como feas-no atractivas.
Cuando utilizamos el aspecto de otra para darnos golpes es violencia gratuita. Señaló aquí que no depende de la persona a la que han elegido como la razón de sus males. Envidia quien quiere y se bajonea quien quiere. Nunca dejes de vestirte como te gusta o peinarte como te gusta porque a alguien le joda lo estupenda que eres. Despáchala. Puede quedarse o irse, pero no cambiarte. Únete, contágiate o vete.
¿Quién quiere ser la guapa del grupo pudiendo ser un grupo de guapas? De verdad que lo de la competición es viejo y huele mal. Y las que quieren competir… you ugly just for that. No se puede competir con la belleza que sale de dentro, con la que se viste y se peina por diversión, ni con la que simplemente lleva una camiseta blanca sin sujetador y como único adorno, el protector solar. Es una pérdida de energía intentar superar eso. Supérate a ti y a tus ideas. Y sí, quiérete un poco aunque no sepas como. Yo tampoco sabía y aprendí. Échale cariño, échale cojones. Es más util que intentar ser la más guapa. Que no estamos en Miss España, gracias a Dios.
Que es que no nos damos cuenta, que no pensamos que mañana puede ser nuestro último día y aquí andamos, amándonos a medias hasta que alguien nos ame por ser la mejor, la más guapa, la más lista. Sea ese amor que buscamos el de un padre, un novio o una amiga.
Vivimos en la súplica. Aquí no hay que suplicar, hay que declarar como nos queremos sentir. Y lo siento, pero nos sentimos tan mal como pequeñas elegimos vernos. Y añado, el magnetismo de alguien que no está intentando ser atractivo supera a cualquiera que activamente esté intentando llamar la atención. Stop it. Sólo vas a conseguir repeler aquello que deseas.
Vamos a dejar de reducirnos a un aspecto específico. Vamos a dejar de reducirnos a un cuerpo. Vamos a dejar de mirar a los demás para compararnos y vamos a verlos para inspirarnos, para admirarlos. Es ahí cuando sabes que has sanado. Cuando lo aprecias en el otro y no lo niegas en ti. Y no sabéis la paz que da no ser mas prisionera de esos pensamientos de mierda.
No podemos estar de morros porque pensamos que alguna amiga es más guapa que nosotras. A mí me encanta eso. Verlas entrar por la puerta del bar, que la gente se quede mirando y pensar: Yeah, that’s my friend.
Love,
Nu.